De acuerdo. Admito que 300 gramos de garbanzos dan para mucho falafel y, cuando no tienes paciencia para tirarte la vida delante de la sartén, sobra masa, mucha masa. Lo bueno es que con un mínimo de imaginación, salen cosas tan ricas como estas tortillitas. Sin aceite. Algo más secas que las croquetas de falafel, pero mucho menos calóricas si estamos cuidando la linea. (A quién quiero engañar, yo no estoy cuidando nada de nada).
La receta es muy parecida a la de falafel que publiqué anteriormente, aunque he cambiado un poco las cantidades de especias, así que la vuelvo a dejar por aquí por si alguien se anima a probarla.
RECETA DE TORTILLITAS DE FALAFEL
Ingredientes:
300 g de garbanzos secos
1 cebolla
1 diente de ajo
2 cucharillas de ajo en polvo
1 cucharada de perejil en polvo o perejil fresco
1 cucharada colmada de comino
2 cucharillas de sal
1/2 cucharilla de pimienta negra
1 cucharada de bicarbonato
1 taza de agua
1 taza de pan rallado
aceite de oliva (opcional)
Preparación:
Poner los garbanzos a remojar 24 horas antes. Cambiar varias veces el agua a lo largo del día. Una vez transcurrido el tiempo, enjuagar y escurrir bien y añadir a la picadora.
Picar la cebolla y el ajo finamente y añadir al vaso de la picadora.
Añadir el perejil, ajo, comino, sal, pimienta negra, bicarbonato, pan rallado y 3/4 partes de la taza de agua a la picadora y picarlo todo de forma que quede una pasta grumosa (sin llegar a homogeneizarse). Si la masa está muy seca, ir añadiendo agua poco a poco, hasta obtener una consistencia maleable.
Una vez picada, traspasar a un bol y mezclar la masa manualmente para asegurarte de que todos los ingredientes están distribuidos homogéneamente.
Dejar reposar la masa en la nevera al menos media hora para que se vaya asentando y coja consistencia.
Finalmente, calentar una sartén antiadherente mediana a fuego medio-alto. Se puede añadir un poco de aceite de oliva para dar más sabor y jugosidad a las tortillas, pero no es necesario.
Extender la masa de falafel por toda la superficie de la sartén, asegurándote de que tenga un grosor mínimo de 0,5 cm y máximo de 1 cm. De ser más gruesa tardará mucho más tiempo en hacerse la masa por dentro y si queda cruda puede resultar indigesta.
Dorar bien por los dos lados, dejando cocinar las tortillas un mínimo de 3 minutos por cada lado.
Mi consejo: cocinar una porción muy pequeña de masa para probarla y rectificar de sal, pimienta o especias al gusto.
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